El músico
estadounidense Richie Sambora, guitarrista del grupo Bon Jovi, confesó en una
entrevista con la revista People que "tocó fondo" cuando entró el año
pasado en el centro de rehabilitación estadounidense de Cirque Lodge en Utah.
"Me divorcié,
estaba en medio de la lucha por la custodia de mi hija, tenía problemas de
adicción con el alcohol y mi padre se estaba muriendo", afirmó el músico
de 48 años.
El pasado mes de
septiembre, Sambora ingresó durante una semana en este centro de rehabilitación
del estado de Utah, donde coincidió con la joven actriz estadounidense, Lindsay
Lohan.
El compositor,
nacido en Nueva Jersey, apuntó a que gran parte de su recuperación se debe al
apoyo incondicional de sus amigos, su banda musical y "especialmente"
de su madre.
Como hijo único,
el guitarrista de Bon Jovi está muy unido a su madre, Joan, y lo estaba también
a su padre, Adam, quien murió el año pasado de cáncer de pulmón.
"Te sientes
como si te estuvieras ahogando en un mar de desastres", afirmó Sambora en
relación a la lucha familiar contra el cáncer de pulmón.
Precisamente, la
formación musical Bon Jovi dedicó su último concierto, celebrado en Manhattan
(Nueva York) el pasado 12 de febrero para el Centro de Cáncer de la Ciudad, a
la memoria del padre de Sambora.
Fruto del
matrimonio con la actriz estadounidense Heather Locklear, la pareja tuvo una
hija, Ava, quien ahora ya tiene diez años.
En relación con
su paternidad, Sambora señaló: "me encanta ser padre" y "me
gustaría tener más niños si pudiera. Tendría un par más, uno o dos más, antes
de morir".
Preguntado por
si piensa en alguien concreto para llevar a cabo su deseo de tener más hijos,
el guitarrista bromea al decir "que hay un par pero no voy a decir nada al
respecto".
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